Thekchen Chöling, Dharamsala, HP, India - Un grupo de amigos se ha reunido esta mañana en Taiwán para celebrar el 85 cumpleaños de Su Santidad el Dalái Lama. Él accedió a su petición de dar una breve enseñanza para marcar la ocasión. Los representantes de los anfitriones taiwaneses aún estaban presentando el evento en chino cuando Su Santidad entró en la sala. En cuanto se sentó, pudo ver en las pantallas delante de él a muchas de las mil personas que había en la audiencia saludándolo y sonriéndole. Se rió y devolvió el saludo.
«Hoy han organizado este evento y me han pedido que de una enseñanza —les dijo—. Desde que visité Taiwán por primera vez, todos ustedes han estado cerca de mi corazón. Pienso en muchos de ustedes como viejos amigos y permanecen constantemente en mi mente. Hoy les explicaré los Ocho versos para entrenar la mente de Geshé Langri Tangpa. Es un texto corto enfocado en la mente del despertar o bodichita que tiene su fuente en la Guirnalda Preciosa de Nagaryuna. Hacia el final de esa obra hay veinte versos que tratan de la bodichita. Concluyen con lo siguiente:
»Que pueda yo ser siempre un objeto de disfrute
para todos los seres sensibles conforme a sus deseos,
y sin interferencias, como lo son la tierra,
el agua, el fuego, el viento, la hierba y los bosques.
»Los seres sensibles aprecian sus propias vidas,
que los aprecie yo a ellos más que a la mía.
Que sus malas acciones den su fruto para mí
y todas mis virtudes fructifiquen en ellos.
»Shantarakshita, uno de los más destacados eruditos de la tradición de Nalanda y seguidor de Nagaryuna enseñó esto por primera vez en el Tíbet. Más tarde, Dipankara Atisha, cuyos discípulos eran conocidos como Kadampas, porque tomaban cada letra de las enseñanzas del Buda como una instrucción para practicar, lo enseñó de nuevo.
»Geshé Langri Tangpa cultivaba constantemente la bodichita y se conmovía tanto por el sufrimiento de los seres sensibles que lloraba regularmente y era conocido por su expresión lastimera. Yo también he cultivado la bodichita durante más de 50 años sobre la base de las enseñanzas que recibí en la Guía del Modo de vida del bodisatva de Shantideva. Sin embargo, no tengo una cara triste como Langri Tangpa porque la Guía aconseja:
»Tendré siempre autocontrol y siempre me mostraré sonriente. Sin mostrarme gruñón ni arisco, seré honesto y amigo de los seres.
»Trato de cultivar la bodichita en todo momento y recito los Ocho Versos todos los días, pero aún así me río y sonrío. Considero a todos los seres sensibles como mis amigos y pienso en ellos con compasión y afecto. Combinar tal actitud con un poco de comprensión de la vacuidad me da paz mental. En el capítulo seis de su Ingreso al camino medio, Chandrakirti describe la combinación en el bodisatva de la bodichita relativa y la última:
»Con las blancas alas del ser en sí y lo convencional extendidas, este rey de los ánades alza el vuelo al frente de los patos que son los seres y, empujado por el viento de la virtud, va al más allá supremo del océano de cualidades de los Victoriosos.
»Como ya he dicho, la práctica de la bodichita me trae paz mental. Es un pensamiento que de nuevo Shantideva resume:
»Hoy, frente a todos los Protectores, invito a los transmigrantes al estado de Sugata y hasta entonces a la felicidad. Que dioses, semidioses y demás se alegren».
Su Santidad explicó que los primeros siete de los Ocho Versos hablan sobre la bodichita convencional. El último verso trata de la visión de la vacuidad. Mientras leía la primera línea del primer verso: «Que siempre aprecie a todos los seres», recomendó a sus oyentes que se preguntaran: «¿Quién es este 'yo'? ¿Dónde se encuentra este "yo"?»
«Cuando me despierto por la mañana, reflexiono sobre unos versos de la Sabiduría Fundamental del Camino del Medio de Nagaryuna que dicen:
»No es los agregados ni distinto de los agregados. Los agregados no están en él ni él está en ellos. El Tathågata no posee los agregados. ¿Qué es el Tathågata?
»A menudo lo reelaboro para referirme a mí mismo y reflexionar sobre ello en consecuencia:
»No soy ni uno con los agregados, ni diferente de los agregados, Los agregados no están en mí, ni yo en ellos. No poseo los agregados. ¿Qué soy?
»Cuando buscas este yo, no lo encuentras. Chandrakirti lo deja claro en su Ingreso al camino medio:
»No podemos afirmar que un carro es otra cosa que sus partes, ni que es su dueño, ni idéntico a ellas. No está en sus partes; sus partes no están contenidas en él. No es la mera colección de las partes ni su forma.
»Así, este razonamiento séptuple revela, en términos últimos o mundanos, que nada está establecido. Pero si los fenómenos se dejan como se encuentran, sin analizar, se imputan de hecho en dependencia de sus partes.
»No podemos encontrar nada que podamos señalar como el yo, y sin embargo existe por designación. ¿Por qué analizamos las cosas de esta manera? Porque tenemos conceptos erróneos inapropiados sobre el yo, que dan lugar a emociones nocivas. Nagaryuna se refiere a esto en su Sabiduría Fundamental:
»Acabar con el karma y las aflicciones es la liberación, el karma y las aflicciones provienen de los pensamientos discursivos y estos de las elaboraciones mentales. Estas se agotan a través de la vacuidad.
»Cuando piensas en ti mismo con la idea: 'Soy chino o soy tibetano', y buscas este yo que parece ser el que controla tu cuerpo, tu habla y tu mente, debes preguntarte, '¿Dónde está?' '¿Dónde está este yo que tienes la sensación de que es independiente de tu cuerpo y de tu mente?' Esta concepción errónea de un yo independiente es la que proporciona la base para las emociones negativas como el apego y la ira».
Su Santidad subrayó la importancia de emplear la lógica y la razón para ahondar en la realidad. Señaló que los seguidores de la Tradición Pali fundamentan su conocimiento en la citación de las escrituras, pero los que siguen a Nagaryuna y la Tradición de Nalanda se basan en la lógica y la razón. Reiteró la gran importancia que da a la Sabiduría Fundamental de Nagaryuna y al Ingreso al Camino Medio de Chandrakirti, y señaló que siempre guarda copias de estos libros en su escritorio.
Afirmó que la visión de la vacuidad nos permite entender que podemos poner fin a las emociones nocivas. Mencionó que como el Continuo Sublime afirma que todos tenemos la naturaleza de Buda; las aflicciones mentales pueden ser completamente superadas. Son meramente adventicias, pero la claridad y la conciencia de la mente permanecen naturalmente dentro de nosotros.
«Todos queremos la felicidad, no queremos el sufrimiento, pero ambos se relacionan con nuestro estado mental. La transformación de nuestras mentes es la raíz de la felicidad. Hoy en día, el mundo se centra principalmente en el desarrollo externo. Sin embargo, las antiguas tradiciones indias hacen hincapié en la mente como la verdadera fuente de la felicidad y en que para conseguirla es necesario transformar nuestra mente. Esta es la base de las antiguas tradiciones de "ahimsa", la no violencia, y "karuna", la compasión. El Buda Shakyamuni las practicó y después de su iluminación las enseñó junto con la visión de la vacuidad.
»Sin embargo, también aconsejó a sus discípulos que fueran escépticos: "Así como los sabios prueban el oro quemándolo, cortándolo y frotándolo, así, bhikshus, deberías aceptar mis palabras y no por respeto a mí"».
Su Santidad declaró que si examinamos nuestras emociones nocivas, nuestras emociones destructivas, encontraremos que no tienen una base sólida. Por contra, la compasión y demás no sólo están firmemente arraigadas en la razón, sino que pueden ser fortalecidas a través de la práctica. Las emociones destructivas como la ignorancia surgen de la confusión a la que estamos acostumbrados. Sin embargo, dijo, la práctica del dharma no consiste principalmente en recitar oraciones, como las que los budistas chinos y japoneses gustan de dirigir a Amitabha. La práctica del dharma implica usar nuestra maravillosa inteligencia humana para distinguir el bien del mal y enfrentar nuestras emociones negativas.
Volviendo al primero de los ocho versos, Su Santidad comentó:
«Tenemos una conexión con los seres sensibles. Es en relación con ellos que cultivamos la bodichita y la compasión y podemos desarrollarlas infinitamente. La Guirnalda Preciosa de Nagaryuna expresa esta conexión vívidamente:
»Los seres sensibles aprecian sus propias vidas, que los aprecie yo a ellos más que a la mía. Que sus malas acciones den su fruto para mí y todas mis virtudes fructifiquen en ellos.
»Cultivar la compasión por los seres sensibles es comparable a la forma en que hacemos negocios, cuando invertimos una pequeña cantidad de capital con el fin de obtener un beneficio. La clave del segundo verso: "Considerar a los demás como supremos" es una recomendación para superar el orgullo y la arrogancia. El tercer verso nos recuerda que responder a la más pequeña provocación con emociones destructivas nos resulta muy familiar. Incluso en los sueños debemos aprender a controlarlas cuando surgen: «Que me enfrente a ellas con firmeza para desmantelarlas».
»En el tantra hay maneras de llevar la ira y el apego al camino del desarrollo espiritual, pero se basan en nuestra primera comprensión del camino convencional.
»El cuarto verso nos aconseja ver a todos los seres, incluso a los que tienen mala naturaleza, como agradables y atractivos. Hecerlos objeto de nuestro amor y compasión».
Su Santidad explicó que los siguientes versos recomiendan aceptar la derrota y ofrecer la victoria a aquellos que nos han perjudicado, viéndolos como excelentes amigos espirituales. Como la Guía de la forma de vida del Bodisatva señala, sin un enemigo que nos ponga a prueba, no tendríamos un contexto para desarrollar realmente la paciencia. El séptimo verso continúa, «Que pueda dar todo beneficio y felicidad a mis madres, y que pueda tomar todo su daño y dolor en secreto sobre mí».
Finalmente, la octava estrofa se convierte en una visión de la realidad: «Que perciba todos los fenómenos como ilusiones». Ya sea que se relacione con el dolor o con el placer, todo parece existir independientemente. La física cuántica distingue entre apariencia y realidad afirmando que las cosas parecen existir de manera objetiva, cosa que no es cierta. Nuestros amigos y enemigos parecen tener un estatus muy objetivo, pero cuando buscamos la base de esta apariencia, no la encontramos. Sin embargo, es porque pensamos que existen intrínsecamente de esta manera que generamos ira o apego hacia ellos. Aprender a ver todas las cosas como ilusiones es lo que nos lleva a liberarnos de la esclavitud.
Su Santidad declaró que la Guía de Shantideva es el mejor libro para leer si quieres aprender sobre la bodichita convencional, pero cuando se trata de la visión de la bodichita última, es mejor leer la Sabiduría Fundamental y el Ingreso al Camino Medio. Elogió especialmente el capítulo 8 de la Guía por su presentación de la práctica del intercambiarnoscon los demás y el capítulo 6, sobre la paciencia.
«Cuando todavía estaba en el Tíbet, pensaba que la práctica de la bodichita era maravillosa y admirable, pero muy difícil de lograr. Más tarde, en la India, después de recibir explicaciones de la Guía, empecé a darme cuenta de que era factible si se trabajaba lo suficiente en ella.
»Mañana es mi cumpleaños y he sugerido que si quieren hacerme un regalo, lo que podrían hacer es recitar al menos mil 'manis', o mantras de seis sílabas, sin dejar que su mente se desvíe. La primera sílaba, 'Om', consiste en tres letras A O y Ma, que representan nuestro cuerpo, habla y mente. Es sobre la base del cuerpo, el habla y la mente que designamos el "yo", que generalmente está bajo la influencia de emociones nocivas. Podemos purificarlas y alcanzar la mente de un Buda.
»La forma de transformar nuestro cuerpo, habla y mente impuros es emplear la mente del despertar o bodichita representada en el mantra por la palabra "Mani", que significa joya, y la sabiduría está representada por 'padme', un loto. La sílaba "Hung" final representa la combinación de bodichita y sabiduría.
»Si cada uno de ustedes recita el mantra mil veces, el beneficio se multiplicará. Y si dedican el mérito a mi larga vida, me ayudará a vivir hasta los 108 o 110 años.
»A medida que el escenario político cambie, puede ser que pueda volver a visitarlos en Taiwán. Eso espero. Pase lo que pase, siempre estaré con ustedes en espíritu. Por favor, cuídense. Gracias».
Los organizadores expresaron su agradecimiento a Su Santidad, a las mil personas que asistieron y a los trescientos voluntarios que ayudaron. Dieron las gracias también al intérprete chino, Jamyang Rinchen. Finalmente, anunciaron la donación de seis ambulancias. Su Santidad sonrió y se despidió con la mano.