Thekchen Chöling, Dharamsala, HP, India - Daniel Aitken, director general de la editorial Wisdom, abrió hoy las actas de la presentación de la traducción al inglés del segundo volumen de la serie Ciencia y Filosofía en los Clásicos Budistas Indios deseando a Su Santidad el Dalái Lama: «Buenos días». Le dio las gracias por unirse a una reunión virtual en la que también participaban el editor de la serie Thupten Jinpa, los traductores de este volumen Dechen Rochard y John Dunne, así como los traductores de otros volúmenes, Ian Coghlan y Donald López.
Aitken describió la publicación de esta serie como un proyecto ambicioso. Señaló que los tibetanos son los custodios de la Tradición de Nalanda, que a través de la serie se ofrece de nuevo a la India y al mundo entero. Declarando que Publicaciones Sabiduría se siente honrado de poner estos libros a disposición, realizó las formalidades de entregar un primer ejemplar, con un pañuelo de seda blanca, a Su Santidad.
A continuación, invitó a John Dunne a hablar sobre los ensayos que había escrito para presentar cada capítulo del libro. «Este volumen sobre la mente —explicó Dunne desde Madison, Wisconsin—, es importante porque el budismo tiene la base teórica sobre el funcionamiento de la mente de la que carece la ciencia moderna. Pensamos que los ensayos introductorios eran, pues, necesarios para hacer este volumen accesible a los lectores de Occidente.
»Los relatos budistas de la mente están motivados por un objetivo general de aliviar el sufrimiento. Además, las teorías budistas proporcionan un relato de la cognición que, a diferencia de los primeros modelos occidentales, no asume que existe un único "yo" autónomo y controlador que es el agente de esas cogniciones. Escribí estos ensayos teniendo en cuenta esas diferencias y tratando de construir puentes entre la ciencia budista y la ciencia moderna.
»En la ciencia cognitiva occidental existe una distinción entre la conciencia fenoménica y la de acceso y esto se refleja en categorías budistas como la de los cinco factores mentales que ratifican el objeto o la distinción entre las cogniciones conceptuales y las no conceptuales.
»Esperamos ayudar a los lectores a apreciar los aportes de la Tradición de Nalanda al estudio de la mente. Tratamos de señalar las áreas de beneficio. Entre los científicos y clínicos, hay un gran interés en los efectos de prácticas contemplativas como el 'shamatha' y la meditación de atención plena en la mente y el cuerpo. Los ensayos tratan de responder a lo que sucede cuando meditamos... ¿Cuáles son las teorías? Y también a cómo funciona la meditación».
Daniel Aitken comentó que esta serie de libros es única incluso desde una perspectiva budista. Le preguntó a Su Santidad si podía hablar de sus razones para iniciar su compilación.
«Respeto todas las principales tradiciones religiosas —respondió Su Santidad—. A pesar de las diferencias filosóficas entre ellas, todas transmiten un mensaje de amor, tolerancia, perdón y autodisciplina. Desde una perspectiva budista, las religiones son una creación humana y se centran en las buenas cualidades humanas, como la compasión y el perdón. Estas son cualidades que contribuyen a que podamos vivir una vida feliz.
»Hay diferencias filosóficas incluso en las distintas tradiciones dentro del budismo. Sin embargo, en general, es un error pensar en términos de "mi religión" y "su religión". Y es especialmente desafortunado luchar en nombre de la religión. Por lo tanto, debemos promover la armonía interreligiosa.
»En cuanto al budismo, el Buda aconsejó a sus seguidores, "Monjes y eruditos, tal como examináis bien el oro quemándolo, cortándolo y raspándolo, es así como debéis aceptar mi palabra, no por respeto a mí". Aunque la tradición Pali se basa en la fe en las palabras del Buda, la tradición de Nalanda, que era un centro de aprendizaje, tomó un enfoque lógico y razonado. Los eruditos sometieron incluso las palabras del Buda a un escrutinio razonado.
»En su Sabiduría Fundamental del Camino Medio, Nagaryuna declaró que todas las enseñanzas del Buda deben verse en el marco de las dos verdades, la convencional y la última. En el centro de este enfoque está la comprensión de la naturaleza de la realidad. El Buda no creó la distinción entre la verdad convencional y la última, son parte de la realidad. Y el énfasis en el budismo está en la comprensión de la naturaleza de la realidad. La verdad convencional se basa en nuestra percepción de la realidad en el nivel de las apariencias. Hay una disparidad entre las apariencias y la forma en que las cosas son. La verdad última pertenece a la forma en que las cosas son en un sentido último.
»Tras elaborar las dos verdades, el Buda explicó las cuatro nobles verdades comenzando con la verdad del sufrimiento y su origen. El sufrimiento tiene tres niveles. El primero es el sufrimiento evidente del que incluso los animales son conscientes. El siguiente es el sufrimiento del cambio, que la mayoría de los seres humanos confunden con placer. Subyacente a ambos está el sufrimiento fundamental que se deriva del condicionamiento omnipresente. El sufrimiento surge de causas, así que si no queremos encontrar sufrimiento, tenemos que identificar esas causas y eliminarlas.
»Nagaryuna menciona que las dos causas principales son las acciones y las emociones negativas. La liberación se produce cuando cesamos estas dos. El karma surge de las emociones nocivas y éstas a su vez derivan de elaboraciones conceptuales, que se sustentan en la ignorancia. La ignorancia es superada por la comprensión de la naturaleza de la realidad.
»En cuanto comprendemos que es posible superar estas causas de sufrimiento, nace en nosotros el entusiasmo por seguir el camino de la práctica. La eliminación de las emociones negativas no se logra mediante la fe y la oración, sino mediante el entrenamiento de la mente. Para seguir el camino, hay que conocer la mente. Para aclarar la mente y superar las emociones negativas, debemos conocer la naturaleza de la mente. Un texto dice que la naturaleza principal de la mente es la luz clara.
»Hay varios niveles de la mente y las emociones. Las emociones destructivas se producen en un nivel burdo de la mente debido a ciertos factores. Hay niveles más sutiles de la mente que experimentamos durante la meditación o en el sueño profundo. El nivel más sutil de la mente se manifiesta en el momento de la muerte, en la culminación de la disolución de todos los procesos de pensamiento conceptual. En ese momento, la mente de luz clara se manifiesta libre de cualquier aflicción, clara y pura.
»Es importante investigar la mente y los diferentes niveles de conciencia, porque incluso la gente común experimenta el nivel más interno y sutil de la mente, la mente primordial de luz clara, en el momento de la muerte.
»Si examinamos los recursos que encontramos en el budismo, veremos que el énfasis principal está en la comprensión de la naturaleza de la realidad. Como dije antes, la fuente fundamental de nuestros problemas es la ignorancia de la naturaleza de la realidad, que da lugar a las emociones negativas. Tenemos que poner fin al mecanismo que da lugar a las emociones nocivas, que están enraizadas en la ignorancia. Una tecnica que vemos en el budismo, que culmina en el tantra del yoga superior, se describe durante la tercera ronda de las enseñanzas de Buda, y enfatiza la luz clara subjetiva.
»Hay niveles progresivos de conciencia en el vajrayana. Mediante el uso de técnicas como el 'pranayama', centradas en la respiración, es posible llevar la conciencia a su estado más sutil. Esta es una forma de acercarse a la pura luminosidad o a la mera claridad y conciencia.
»Otro enfoque se reveló en la segunda ronda de enseñanzas, que trataba de la perfección de la sabiduría. Nagaryuna y Aryadeva han elaborado comentarios sobre estas enseñanzas. El punto que señalan es que detrás de nuestra percepción de la realidad hay un error fundamental, la noción de una realidad duradera. Esto sirve como base para crear todo el edificio de nuestra ingenua visión de la realidad, que da lugar a nuestra relación emocional con el mundo. Por lo tanto, el objetivo aquí es conseguir que nuestra comprensión de la realidad sea correcta. Tenemos que analizar y deconstruir diferentes capas de ignorancia. Tenemos que darnos cuenta de que la forma en que el mundo se nos aparece no es la forma en que existe. Aryadeva comenta que la ignorancia impregna nuestras emociones nocivas de la misma manera que nuestro sentido del tacto abarca todos nuestros otros sentidos.
»La forma en que podemos superar la ignorancia es comprender la vacuidad en términos de surgimiento dependiente. Necesitamos refinar nuestra comprensión del mundo objetivo entendiendo la enseñanza sobre la vacuidad y reduciendo progresivamente nuestra dependencia de los niveles burdos de la mente. Ambos enfoques se basan en la comprensión de la naturaleza de la realidad.
»Tanto la liberación como el ciclo de la existencia son estados mentales. La tradición india, y en particular la budista, hace hincapié en la comprensión de la naturaleza de la mente, no necesariamente en términos de práctica religiosa, sino de la comprensión de la naturaleza de la realidad.
»La ciencia moderna es docta en lo que respecta al mundo físico, pero cuando se trata de comprender la mente, la tradición india y budista tienen mucho más que ofrecer, no sólo fundamentos teóricos que incluyan definiciones y categorizaciones de la mente, sino también técnicas para entrenarla, que incluyen métodos para desarrollar una mente centrada así como una aguda facultad crítica ('shamatha' y 'vipashyana'). Estos son dos tipos clave de práctica, una de establecimiento mental, de concentración, y la otra analítica y discursiva. En consecuencia, los científicos encuentran el diálogo con los budistas enriquecedor y beneficioso.
»Los neurocientíficos correlacionan la mente con el cerebro, pero hacen poca distinción entre las modalidades sensoriales y mentales, que la tradición india trata en detalle.
»Hasta finales del siglo XX, la corriente general en Occidente prestaba poca atención a la mente. Cuando usaban la palabra mente, sólo pensaban en el cerebro. Sin embargo, últimamente han salido a la luz casos de personas, a menudo experimentadas meditadoras, que están clínicamente muertas pero cuyos cuerpos permanecen frescos. La ciencia es incapaz de explicar este fenómeno. Es más, hay casos de niños pequeños con recuerdos claros de sus vidas pasadas. Gradualmente los científicos están llegando a aceptar que hay algo que afecta al cerebro, la experiencia, lo que llamamos mente».
Su Santidad habló de la literatura budista y de cómo su contenido puede ser clasificado bajo tres encabezados: ciencia, filosofía y religión. Mencionó que había pedido a los eruditos que recopilaran materiales de estas fuentes sobre la ciencia, especialmente en relación con la mente, y la filosofía. Declaró que se le ha informado acerca de que los científicos chinos que leyeron la traducción del primer volumen se sorprendieron por el enfoque científico adoptado por la tradición budista tibetana. Confirmó que las explicaciones científicas y filosóficas, aunque procedan de fuentes textuales religiosas, pueden examinarse en un contexto objetivo y académico.
Cuando Daniel Aitken preguntó si Su Santidad veía algún beneficio de esta serie de libros para el mundo aparte de su contribución al conocimiento científico, llamó la atención sobre la necesidad de que la gente común practicara la higiene emocional. Aunque todo el mundo quiere estar sano y feliz, generalmente no saben cómo lograr la paz mental. Declaró que es hora de que la gente preste atención no sólo a su salud física, sino también a su bienestar mental.
Sugirió que la ciencia también puede buscar la manera de desarrollar la paz mental en la vida diaria. Dio el ejemplo de la observación de Shantideva en su Guía de la forma de vida del Bodisatva de que cuando se trata de cultivar la paciencia, nuestro adversario es nuestro mejor maestro y debemos estarle agradecidos. Señaló que etiquetamos a las personas como amigos o enemigos en nuestra mente y que si somos capaces de sentir gratitud hacia un enemigo, eso preserva nuestra paz mental. Añadió que estos juicios también están relacionados con el reconocimiento de que los fenómenos no existen tal y como aparecen. Debido a que tales pensamientos ayudan a reducir la ira y el apego, Su Santidad concluyó que no está propagando el budismo, sino la simple paz mental.
Aitken invitó a la Dra. Dechen Rochard a hablar sobre su experiencia en la traducción de este libro. Comenzó agradeciendo a Su Santidad por brindarle la oportunidad de servirle como traductora. «Traducir suele ser una actividad solitaria —continuó—, pero me he encontrado trabajando con cuatro Geshes, Thupten Jinpa, Ian Coghlan y John Dunne, con confianza y respeto mutuo.
»El texto contiene una amplia gama de materiales diferentes y complejos y hacer que sea accesible a los lectores ingleses ha sido un desafío. Construir puentes es un proyecto a largo plazo. Este libro es parte de la fundación.
»Trabajar en este proyecto me ha obligado a profundizar en la literatura budista india, que ya conocía de forma más superficial. Mi comprensión se ha enriquecido, gracias».
Aitken invitó a Thupten Jinpa a explicar la importancia de la serie. «Su Santidad, colegas y amigos —comenzó—, me siento profundamente honrado de ser parte del lanzamiento hoy del segundo volumen de Ciencia y Filosofía en los Clásicos del Budismo Indio. Me gustaría destacar la naturaleza altamente ambiciosa de la serie. Lo que Su Santidad ha concebido y creado aquí es verdaderamente innovador en los 2500 años de historia del pensamiento budista. La serie ofrece al mundo entero las ideas, el conocimiento y la sabiduría de los grandes maestros de Nalanda, la universidad de la India.
»Los tibetanos nos enorgullecemos de ser los custodios de la tradición de Nalanda. Basándose en el Abhidharmakoshakarika, desarrollaron un mapa de la mente y elaboraron la estructura de nuestra experiencia mental. La epistemología de Dignaga, Dharmakirti y otros analiza la naturaleza de la conciencia. Los textos del Vajrayana, especialmente los relacionados con el tantra del yoga superior, presentan una visión única en la que la mente y el cuerpo se consideran en términos de energía y conciencia. Además, la tradición Yogachara proporciona técnicas meditativas para transformar la mente. Como observó John Dunne, este volumen será de especial interés para los neurocientíficos.
»Como editor de la serie, me gustaría agradecer a Dechen Rochard por su traducción, a John Dunne por sus ensayos introductorios, al editor de Wisdom, Daniel Aitken, al editor senior David Kittelstrom y a su colega Mary Petrusewicz, por su dedicación. También debo expresar mi agradecimiento a los cuatro eruditos monásticos, Geshé Jangchup Sangyé, Abad de Ganden Shartse, Geshé Ngawang Sangyé del colegio Drepung Loseling, Geshé Chilsa Drungchen Rinpoché del colegio Ganden Jangtsé, y Geshé Lobsang Konchok del colegio Drepung Gomang, que trabajaron durante muchos años preparando los manuscritos tibetanos originales de la serie. Ha sido realmente una fuente de profundo honor para mí poder desempeñar algún papel en la labor de hacer realidad esta importante visión de Su Santidad».
Cuando Daniel Aitken preguntó sobre su esperanza y visión para la serie, Su Santidad respondió que en los tiempos modernos ha habido un gran desarrollo material, pero que se ha prestado menos atención a nuestro mundo interior. «Nos enfrentamos a dificultades que no deseamos, y sin embargo las hemos creado nosotros mismos. Necesitamos encontrar maneras de mantener nuestras mentes en paz. Por lo tanto, es útil para nosotros saber cómo funcionan nuestras mentes y emociones. En mi experiencia, los consejos contenidos en la Guía de la forma de vida del Bodisatva de Shantideva, en la Sabiduría fundamental de Nagaryuna y en los 400 versos de Aryadeva me han ayudado a mantener mi paz mental. Por lo tanto, creo que este conocimiento puede ser de beneficio para muchos otros hermanos y hermanas humanos.
Aitken agradeció a Su Santidad una vez más sus sabias palabras y le dijo que había sido un honor participar en este trabajo. Su Santidad recogió una copia del segundo volumen de la serie y posó con ella ante la pantalla en la que se veían los rostros de los distintos colaboradores.
Añadió unas palabras finales de agradecimiento por el trabajo de los traductores en la traducción de los dos libros que se han publicado hasta ahora. Subrayó la importancia de emprender este trabajo con una motivación positiva para beneficiar a los demás, en lugar de simplemente lograr un beneficio económico. Terminó recitando versos de la Guía de Shantideva:
Cualquier alegría que haya en este mundo viene de desear que los demás sean felices, y cualquier sufrimiento que haya en este mundo proviene de desear mi propia felicidad. 8/129
¿Hace falta decir más? Los infantiles se ocupan de sí mismos, los Munis obran por el bien ajeno: mirad la diferencia entre ellos. 8/130
Por eso, yendo de felicidad en felicidad montado en el caballo de la bodichita, que elimina toda pena y fatiga, ¿qué sabio podría desanimarse? 7/30