Nueva Delhi, India - St Stephen's College es una de las tres facultades fundadoras de la Universidad de Delhi. Fue fundada hace 137 años por el Rev. Samuel Scott Allnut y lleva el nombre de San Esteban, que fue adoptado por la Iglesia Anglicana como santo patrono de Delhi después de que los cristianos fueran apedreados hasta la muerte en los disturbios de 1857. Es una de las facultades más prestigiosas de la India, acepta graduados y estudiantes universitarios y ofrece cursos de ciencias y artes liberales. La lista de distinguidos ex-alumnos, políticos, empresarios, artistas, científicos y académicos entre ellos, es larga.
Hoy, día del fundador del St Stephen's College, Su Santidad el Dalái Lama fue invitado a las celebraciones como invitado principal. Al llegar al campus de la universidad, Su Santidad fue recibido por el Ecónomo, el Decano y el Tutor Principal, quienes lo acompañaron a la oficina del Director. Fue presentado al Director, Prof. John Varghese y al Presidente del Consejo de Administración, el Reverendo Warris Masih, que también es Obispo de Delhi.
Después de ponerse la roja toga y el birrete del Colegio, Su Santidad se reunió con miembros de la facultad. Luego se unió a la procesión ceremonial para entrar en la sala. Una vez que todos se sentaron en el escenario y en el pasillo, el director pidió al Reverendo Masih que dirigiera una oración de apertura. El Reverendo recordó las cualidades del Fundador como un buen ciudadano dedicado al servicio de los demás y oró: «Que así seamos nosotros».
Agradeciendo a Rt Revd Masih, Vicerrector de la Universidad de Delhi y a Su Santidad, así como a otros distinguidos invitados y queridos estudiantes, el Prof. Varghese ofreció a todos los presentes una cálida bienvenida el Día del Fundador. Lo describió como un día no sólo para recordar al fundador, sino también a todos aquellos que han dado lo mejor de sí mismos después de él. La Facultad es lo que es gracias a sus esfuerzos. Leyó una larga lista de eminentes maestros, académicos y directores —muchos de ellos miembros de la Hermandad de Cambridge— desde el principio hasta el día de hoy.
Refiriéndose a Su Santidad como hombre de Dios, hombre del mundo y hombre de paz, el Director lo invitó a dirigirse a la reunión.
«No me gusta demasiado la formalidad —comenzó Su Santidad—, cuando nacemos no hay formalidad. No hay formalidad cuando morimos, así que prefiero tomar las cosas con calma mientras estamos vivos. Por lo tanto, me gustaría comenzar reconociendo a mis respetados hermanos aquí en el escenario y a mis hermanos y hermanas aquí en el pasillo. Debajo de estas túnicas, tenemos el mismo tipo de cuerpo humano. Tenemos el mismo tipo de cerebro humano. Somos física, mental y emocionalmente iguales.
»Según su creencia, todos somos creados por Dios y como hijos de un padre amoroso, todos somos hermanos y hermanas. No debería haber ninguna base para que nos peleemos o, lo peor de todo, para que nos matemos unos a otros. Somos animales sociales; sobrevivimos en dependencia de la comunidad. Hoy en día, vivimos en una economía global que traspasa las fronteras. Del mismo modo, todos nos vemos afectados por el cambio climático, que se refleja claramente en un aumento de los desastres naturales, por un lado, y una reducción de las nevadas, por otro.
»Todas nuestras tradiciones religiosas transmiten un mensaje de amor, por lo que es impensable que haya lugares donde la gente sea asesinada en nombre de la religión.
»Gracias a nuestro cerebro y a nuestra maravillosa inteligencia hemos desarrollado el lenguaje y la escritura para poder comunicarnos y explicarnos las cosas. Todas las personas que el Director acaba de nombrar trabajaban al servicio de la educación. Ya no están físicamente entre nosotros, pero los frutos de sus esfuerzos perduran. Deberíamos estarles agradecidos. Realmente admiro su dedicación.
»Como decía, tenemos esta maravillosa inteligencia, pero lo que es importante recordar es que si la usamos de manera constructiva o destructiva depende de nuestra motivación. Por ejemplo, el aprovechamiento de la energía nuclear fue un gran logro, pero su uso en armas de destrucción en masa fue muy triste. Los animales depredadores como los leones y los tigres pueden ser salvajes y despiadados, pero no matan sin motivo, sólo cuando tienen hambre. Nosotros, los seres humanos, desarrollamos armas sofisticadas y nos dedicamos a la guerra, participando descuidadamente en actos de violencia organizada y asesinatos.
»El error es recurrir al uso de la fuerza como medio para resolver problemas. Es por eso que debemos alejarnos del modelo del siglo XX y hacer del siglo XXI una era de paz y compasión. Los científicos nos dicen que tienen evidencia de que la naturaleza humana básica es compasiva. De hecho, nuestra propia experiencia es que cuando sonreímos y somos amigables con los demás, somos felices. Si, en cambio, tratamos a otros con sospecha, somos infelices.
»Seamos religiosos o no, todos necesitamos amigos. Una madre dio a luz a cada uno de nosotros y sobrevivimos gracias a su cuidado y afecto. La educación no se trata sólo de mejorar nuestra maravillosa inteligencia; también se trata de la necesidad de desarrollar un corazón cálido. Este es un colegio cristiano y el mensaje de Jesucristo fue amar al prójimo como a ti mismo. Deberíamos hacer de eso una parte de nuestras vidas. Servir a la humanidad es la manera de usar nuestra inteligencia de manera constructiva.
»Ustedes los jóvenes, miembros de la primera generación del siglo XXI, por favor, continúen su educación con energía, pero combínenla también con un corazón cálido. Hay evidencia de que la ira y el estrés constantes socavan nuestro sistema inmunológico y limitan nuestra salud física. Por otra parte, cultivar una actitud más compasiva y cálida es bueno para nuestra salud.
»Ya sea que te mueva o no la fe religiosa, la calidez de corazón es esencial si quieres ser feliz. Estos valores internos asegurarán no sólo que seas feliz como individuo, sino también que tu familia y tu comunidad también lo sean. Mientras estás aquí en esta universidad, trata de combinar tu enfoque en el logro académico con el de tener un corazón más cálido».
El director John Varghese expresó su aprecio por las simples palabras de sabiduría de Su Santidad. Señaló que Su Santidad ya ha recibido numerosos premios y pidió al Obispo y al Presidente del Consejo de Administración que añadieran a ellos una insignia en forma de escudo del St Stephen's College. Pidió a todos que se pusieran de pie para escuchar el himno del colegio, «Oh Dios, nuestra ayuda en el pasado», seguido por el Himno Nacional.
Los miembros de la facultad salieron de la sala y se reagruparon en el césped para posar para las fotografías con Su Santidad. Su Santidad pasó después en coche por el Ambedkar Memorial y el Fuerte Rojo y regresó a su hotel.