Mundgod, Karnataka, India - Antes de bajar al Salón de Asambleas esta mañana, Su Santidad el Dalái Lama habló con un grupo de patrocinadores y partidarios de la conferencia internacional que comienza mañana: Ye Tsongkhapa, Vida y Legado. Elogió el gran valor y la continua relevancia que tienen hoy en día las tradiciones indias de no violencia y compasión. También expresó su admiración por las prácticas meditativas comunes de la India para desarrollar la calma mental y la comprensión de la realidad. De estas prácticas surgió un mapa de la mente y técnicas para abordar las emociones destructivas como la ira y el miedo, así como directrices para cultivar emociones positivas como el amor y la compasión.
«La razón y el análisis pueden ayudarnos a entender los beneficios de la compasión —les dijo—. Sabemos que nos brindan paz mental, la que a su vez nos transmite fuerza interior, en cuyo contexto se reducen el miedo y la sospecha. Si se piensa en ello, se puede ver que las emociones destructivas están estrechamente relacionadas con el egocentrismo.
»Estos hallazgos se aplican a todos nosotros. Todos queremos ser felices y, como seres humanos, todos tenemos el mismo tipo de cerebro, las mismas emociones y el mismo potencial. Los científicos observan que somos animales sociales, y por tanto la compasión subyace a la naturaleza humana. El futuro de cada uno de nosotros depende de los demás. Por eso, dondequiera que vaya y con quienquiera que me encuentre, siento que todos somos esencialmente iguales».
Abajo, en el Salón de Asambleas Ganden Shartse, Su Santidad observó a los estudiantes, muchos de ellos de la región de Mön de Arunachal Pradesh, debatiendo. El primer grupo tomó como punto de partida una afirmación de la Llamarada del Razonamiento de Bhavaviveka que dice: «de acuerdo con nuestro sistema, designamos a la conciencia como el yo porque es lo que pasa de una vida a otra». Otro grupo se remitió al capítulo 15 de la Sabiduría Fundamental del Camino Medio de Nagaryuna, que se llama Investigación sobre la esencia. El retador quería saber qué significa aquí la palabra esencia. Se le dijo que se refiere al objeto que debe ser negado.
Los estudiantes de la clase de Perfección de la Sabiduría, citando el capítulo 5 del 'Ornamento de los Sutras', discutieron lo que significa que los bodisatvas persigan la mente de la iluminación con sabiduría. Otros examinaron la naturaleza de Buda. Otro grupo discutió sobre la práctica de intercambiarse con los demás, planteando el punto de que para apreciar a otros más que a uno mismo, primero hay que reflexionar sobre su bondad.
Los estudiantes de lógica tomaron como punto de partida citas del Compendio de la realidad (Tattvasamgraha) de Shantarakshita y del Compendio de cognición válida (Pramana-samuchhaya) de Dignaga. En varias ocasiones, los ingeniosos argumentos provocaron sonrisas en la audiencia.
Mientras que en los debates anteriores un solo retador fue contestado por varios encuestados, la presentación terminó con los estudiantes de las clases preliminares que estudiaron Ciencia de la Mente y Compendio de Temarios empleando grupos de retadores y encuestados.
En el verso final se pedía que el mérito generado en estos debates se dedicara a la preservación de las enseñanzas del Buda y de la doctrina de Ye Tsongkhapa, así como a la larga vida de Su Santidad.
«Este tipo de debate sólo tiene lugar entre los tibetanos —reflexionó Su Santidad—. Durante los últimos siglos, los maestros han enseñado a los estudiantes este enfoque, generación tras generación, y lo han encontrado una forma útil de investigar la naturaleza de la realidad. No es una técnica que se limite a discutir ciertos temas, sino que puede aplicarse a muchos otros campos de investigación. Ustedes, aquí, han hecho lo mejor que han podido y me gustaría agradecer a los maestros y abades que los han entrenado.
»El cercano convento de monjas de Jangchub Chöling ha producido varias Geshemas. Lo he visitado en otras ocasiones, pero esta vez creo que va a resultar difícil. Cuando Shantarakshita estableció por primera vez el Vinaya en el Tibet, no pudo traer a ningún bikshunista con él, por consiguiente no tenemos un linaje de gelongmas. Sin embargo, no hay diferencia en la capacidad de estudio de hombres y mujeres.
»En la actualidad, el estudio de la lógica y la práctica del debate se lleva a cabo en las escuelas, donde el profesor correspondiente ya no se denomina profesor de religión sino profesor de filosofía. Espero que todos, monjes, monjas, laicos, jóvenes y viejos, puedan usar la razón y el debate. Las Tres Sillas del Aprendizaje han preservado esta tradición hasta ahora, por favor, manténganla.
»Recuerdo que estaba en el último piso del Drepung Lachi cuando anuncié que las monjas debían ser animadas a estudiar y convertirse en Geshemas. Gyen Lobsang Nyima preguntó: '¿Cómo puede ser eso?’ Le dije que como el Buda había concedido el voto de Bhikshuni así como el de Bhikshu, tenía sentido que también las monjas estudiaran hasta el nivel de Geshés.
»Nagarjuna escribió: 'El deseo, el odio y la confusión surgen completamente de la conceptualización'. Pensamos erróneamente que las cosas existen tal como aparecen. Hoy en día, la física cuántica dice que nada existe objetivamente como aparece. Las emociones destructivas surgen debido a nuestra perspectiva exagerada. Pero cuando investigamos sin prejuicios, descubrimos que las cosas no existen tal como aparecen».
Su Santidad señaló que algunos de los debates habían tratado sobre la mente del despertar o bodichita. Citó unos versos de Shantideva que la elogian:
Si no intercambio mi felicidad
por el sufrimiento de los demás,
no sólo no alcanzaré la budeidad,
tampoco en el samsara tendré felicidad.
Cualquier alegría que haya en este mundo
viene de desear que los demás sean felices,
y cualquier sufrimiento que haya en este mundo
proviene de desear la felicidad propia.
La ofrenda al maestro espiritual (Lama Chöpa) también lo confirma:
Esta enfermedad crónica del egocentrismo
es la causa del sufrimiento no deseado.
Percibiendo esto, que me inspire a culpar, envidiar
y destruir este monstruoso demonio de egoísmo.
Cuidar de mis madres y buscar asegurarlas en la felicidad
es la puerta de entrada a la virtud infinita.
Viendo esto, que me inspire para apreciarlas más que a mi vida,
incluso si se alzan como mis enemigas.
El núcleo de todos estos versos es que preocuparse por los demás es una fuente primaria de felicidad y bienestar. Su Santidad concluyó animando a los monjes a recordar que sólo a través del estudio y la práctica se prolongará la pervivencia de las enseñanzas del Buda.