Shewatsel, Leh, Ladakh, India - Esta mañana Su Santidad ha inaugurado formalmente un nuevo centro de enseñanza en Thupstanling Gonpa, Diskit Tsal, Leh. Construido por miembros de la comunidad local, se trata de un amplio centro, abierto a todas las confesiones religiosas, donde habrá instalaciones para impartir clases de filosofía budista, una biblioteca, etc.

El abad del Gonpa hizo la ofrenda habitual de un mandala a Su Santidad, tras lo cual los representantes de la comunidad Diskit Tsal también solicitaron sus bendiciones. Uno de los representantes de la comunidad pronunció un discurso introductorio en el que expresó su profunda gratitud a Su Santidad por su visita y explicó brevemente los antecedentes y el desarrollo del proyecto. La institución ha crecido hasta su tamaño actual a partir de un pequeño templo budista fundado por primera vez en 1984.
«Queridos hermanos y hermanas espirituales, budistas y musulmanes», comenzó Su Santidad.
«Las personas de Ladakh y Zanskar han sido muy devotas y acogedoras conmigo cada vez que las visito. Como seguidor de Buda, cuya práctica diaria incluye el cultivo de la mente que aspira al despertar o bodichita, estoy comprometido a servir a mis semejantes, sean quienes sean. De hecho, la esencia de todas las religiones es ser de ayuda a los demás. Por supuesto, proporcionar ayuda financiera y otras ayudas materiales es bueno, pero es aún mejor aconsejar a los demás que cultiven un corazón cálido y desarrollen la paz mental.
»Es una suerte que todos hayamos nacido como seres humanos y hayamos conocido las enseñanzas de Buda. Dado que Avalokiteshvara es la deidad patrona del Tíbet, los tibetanos acostumbran a recitar el mantra de seis sílabas "Om Mani Padme Hung" y a observar prácticas como la de evitar matar incluso insectos, y las personas de la región del Himalaya comparten estas amables tradiciones.

»Antes de retirarme de la responsabilidad política, adoptamos el Planteamiento del Camino Medio según el cual buscamos una solución mutuamente aceptable para la cuestión del Tíbet. Esto significa que buscamos una auténtica autonomía en lugar de una independencia total, preocupados principalmente por preservar nuestra identidad, nuestra lengua y nuestro rico patrimonio cultural budista en todas las zonas de habla tibetana.
»Me alegro mucho de que las personas de la región del Himalaya, desde Ladakh en el oeste hasta Arunachal Pradesh en el este, también estén haciendo una valiosa contribución para proteger y preservar la tradición de Nalanda, enraizada como está en la razón y la lógica. Gracias a este enfoque lógico y razonado, muchos científicos pueden interesarse hoy en día por la psicología budista con sus métodos para entrenar la mente y las emociones. Me gustaría felicitarlos por sus esfuerzos».
Su Santidad habló de la afinidad que sentía por la comunidad musulmana de Lhasa, a la que describió como personas muy amantes de la paz. Mencionó haber conocido recientemente a algunas mujeres musulmanas cuyos padres habían vivido en Lhasa antes de 1959, muchas de las cuales hablaban tibetano con fluidez.

Su Santidad volvió a insistir en la importancia de cuidar el medio ambiente. Recomendó plantar y cuidar árboles y tomar medidas para proteger la ecología local.
Su Santidad dijo a su audiencia que los tiempos están cambiando y que llegaría un momento en el que los y las ladakhíes podría volver a visitar Lhasa, lo que provocó un amplio aplauso. Terminó aconsejando a las personas reunidos que fueran felices y tuvieran un corazón cálido.
A continuación, Su Santidad fue invitado a un almuerzo de despedida en el Sindhu Ghat, a orillas del río Indo, cerca de Shey, por el Consejo de Desarrollo de la Colina Autónoma de Ladakh (LAHDC). Entre los presentes se encontraban los consejeros elegidos, encabezados por el consejero ejecutivo principal, Shri Tashi Gyalson, funcionarios del distrito, representantes de diversas organizaciones y comunidades religiosas.

Cuando le pidieron que diera algunos consejos, Su Santidad observó que un aspecto importante de la unidad de la humanidad es nuestra necesidad compartida de amor y afecto. Por eso merece la pena intentar llevar una vida significativa, es decir, cultivando un corazón cálido y trabajando por el bienestar de todos los seres sensibles. Si podemos hacerlo, al exhalar nuestro último aliento, rodeados de amigos y familiares afectuosos, podremos irnos en paz.
Su Santidad elogió los principios ancestrales de la India de ahimsa y karuna (no violencia y compasión), que tienen un gran potencial para crear un mundo más pacífico y armonioso. Señaló que Mahatma Gandhi había propagado la ahimsa y que líderes como Martin Luther King y Nelson Mandela habían seguido su ejemplo. Sin embargo, sugirió Su Santidad, ahora es el momento de practicar también la compasión, que es un factor clave para desarrollar la paz mental y la fuerza interior, factores cruciales para crear una sociedad más feliz.

Por esta razón, añadió, es importante que la formación en compasión forme parte del sistema educativo general, y aclaró que la formación en compasión puede realizarse desde un punto de vista laico y no religioso. También opinó que la India está especialmente bien situada para combinar principios tan antiguos como la compasión y la determinación de no hacer daño, karuna y ahimsa, con la educación moderna.
El Consejero Ejecutivo, Ghulam Mehdi, de Turtuk, ofreció un voto de agradecimiento al final del almuerzo. Rezó para que Su Santidad tuviera una vida larga y saludable y para que siguiera visitando y derramando sus bendiciones sobre Ladakh.










