Thekchen Chöling, Dharamsala, India - Cuando 30 miembros del Comité de Nepal de la Organización de Jóvenes Presidentes (YPO) se reunieron con Su Santidad el Dalái Lama esta mañana, les dijo que el Tíbet y Nepal tienen conexiones históricas de gran antigüedad, y que fue un honor para él recibirlos.
«El rey tibetano del siglo VII, Songtsen Gampo, se casó con una princesa nepalí, así como con una princesa china —observó—. Luego, cuando fundó el Templo de Yokhang, en Lhasa, muchos artesanos nepalíes participaron en su construcción.
»Aquí, en el siglo XXI, hemos mantenido viva la Tradición de Nalanda que se introdujo en el Tíbet en el siglo VIII. La Tradición Budista en Pali, que incluye enseñanzas fundamentales como las Cuatro Nobles Verdades, sus 16 características y los 37 Factores de Iluminación, se basa en la autoridad de las palabras del Buda. La Tradición de Nalanda, sin embargo, justifica la sofisticada filosofía budista sobre la base de la razón y la lógica. Los maestros de Nalanda se preguntaban: ‘¿Por qué enseñó el Buda esto o aquello?’ Hicieron experimentos e investigación.
»Hoy en día, los académicos y profesores de las universidades chinas tienen acceso a los libros que hemos recopilado y publicado aquí en la serie Ciencia y Filosofía en los Clásicos Budistas de la India. Reconocen que el budismo tibetano preserva la Tradición de Nalanda y su enfoque científico.
»Este enfoque utiliza el potencial de la mente humana al máximo. Aunque la psicología, la ciencia y la filosofía que enseña se encuentran en textos nominalmente religiosos, no hay razón para que estos temas no puedan ser estudiados de una manera más objetiva, secular y académica.
»Estos materiales están incluidos en la colección de 300 volúmenes de Kangyur y Tengyur, cuya fuente eran en su mayoría textos indios. Sin embargo, me pregunto si se ha hecho alguna investigación para descubrir cuántos textos, si los hay, tenían fuentes nepalesas y chinas. Y me pregunto también si existen obras en nepalés que no hayan sido traducidas al tibetano».
Su Santidad invitó a los 30 participantes a hacer preguntas. Ajit Shah, el líder del grupo, explicó que había budistas, hindúes y musulmanes entre ellos. Pertenecen a YPO, una comunidad de liderazgo global.
Cuando le preguntaron cómo se logra la felicidad, Su Santidad habló sobre la importancia y la eficacia de los antiguos valores indios de la no violencia 'ahimsa' y la compasión 'karuna'. Observó que en la India los cristianos y los musulmanes también están bajo la influencia de la 'ahimsa'. La prevalencia de la no violencia y la compasión, con el sentido natural de respeto que conlleva, son razones por las que las tradiciones religiosas de este país conviven en armonía.
Señaló que cuando las personas son demasiado egocéntricas, tienden a ser propensas al miedo, la sospecha, la ansiedad y la ira. 'Ahimsa' y 'karuna', la compasión y la abstención de hacer daño a otros, actúan como antídoto para esto. Añadió que los científicos dicen que la naturaleza humana básica es ser compasivos, porque somos animales sociales. Nuestra supervivencia depende de nuestra comunidad.
Su Santidad también mencionó un aspecto importante y único de la filosofía budista: la práctica del 'asamutpada' o surgimiento dependiente. Esto, al igual que la teoría de la falta de existencia intrínseca, significa que los fenómenos no existen tal como aparecen. Comprender esta brecha entre la apariencia y la realidad también socava el egocentrismo. Asimismo, las emociones destructivas, debido a que se basan en una concepción errónea de las apariencias, no tienen una base sólida. Las emociones positivas como la compasión, sin embargo, son realistas y se basan en la razón.
Al ser interrogado sobre cómo ve el futuro, Su Santidad recordó que los comienzos del siglo XX habían sido estropeados por demasiada violencia. Sin embargo, considera que en los últimos años del siglo, la fundación de organizaciones como la Unión Europea y los esfuerzos por reducir las armas nucleares fueron signos de madurez humana. Dijo se siente esperanzado por el creciente número de personas que entienden que la paz mundial depende de que las personas en el mundo encuentren la paz interior.
«Una de las maneras en que la educación moderna es inadecuada —explicó—, es que apenas incluye alguna comprensión de cómo lograr la paz mental. El antiguo conocimiento indio era rico en su conocimiento del funcionamiento de la mente y de las emociones. Creo que esto podría combinarse con la educación moderna para un beneficio generalizado».
Cuando le preguntaron sobre su rutina diaria, Su Santidad se rió y contó una historia sobre un político indio que le preguntó una mañana si había dormido bien. Su Santidad respondió que siempre duerme bien, 9 horas, y lo sigue con 4 horas de meditación. Eso, le dijo en broma, le ayuda a afilar su mente para que así poder embaucar a la gente más eficazmente. El político respondió inmediatamente: «Oh, nunca duermo más de 6 horas, así que no soy capaz de embaucar a la gente en absoluto».
Su Santidad comentó que, a pesar de enfrentarse a todo tipo de dificultades en su vida, ha descubierto que cultivar el altruismo es una fuente útil de fortaleza interior.
Cuando el último interrogador quiso saber el significado de los cantos, Su Santidad sugirió que el canto por sí mismo es sólo sonido. Lo importante es prestar atención al significado de las palabras: son las que pueden cambiar su mente.
