Thekchen Chöling, Dharamsala, HP - Esta mañana, debido al tiempo húmedo, Su Santidad el Dalái Lama se dirigió en coche al pie del templo desde donde tomó el ascensor hasta el piso superior. Cuando llegó al trono situado frente a la estatua de Buda, los laicos de la clase de introducción al budismo de Dharamsala se enzarzaron en un debate. Los escolares reunidos y otros estudiantes recitaron el Sutra del Corazón y los versos de salutación al Buda de la Sabiduría Fundamental y del Ornamento para la Realización Clara.
«Hoy voy a dar la iniciación de permiso para la práctica de Manyushri —anunció Su Santidad—, el bodisatva que encarna la sabiduría y la inteligencia.
»Cuando era niño, probablemente tenía tres o cuatro años, visité el monasterio de Kumbum, que estaba cerca de donde yo vivía. Había un relicario dorado que conmemoraba a Lama Tsongkhapa, que nació en las cercanías. Ye Rinpoché es conocido como un gran ser bendecido por Manyushri. Estudió en monasterios de todas las tradiciones tibetanas: Sakya, Ñingma, Kagyu y Kadam. Como ya he dicho, nació en Amdo, como yo.
»Recuerdo haber visto a jóvenes monjes postrándose ante el relicario y recitando el mantra de Manyushri —Om a ra pa tsa na dhi— y recuerdo haberlo recitado yo también. Este mantra nos ayuda a aumentar nuestra sabiduría e inteligencia, permitiéndonos ver la realidad con mayor claridad. Cuando nuestra mente está despejada, somos más capaces de utilizar nuestra inteligencia natural.
»Gradualmente, a medida que realicemos prácticas externas, internas y secretas en relación con Manyushri, descubrirán que su inteligencia se vuelve grande, clara, profunda y rápida. Nos vuelvemos más hábiles en la composición, el debate y la enseñanza. He recibido la transmisión de todas las diversas prácticas relacionadas con Manyushri.
»Como he mencionado antes, genero la mente que aspira al despertar o bodichita, la aspiración altruista a la iluminación, en cuanto me despierto cada mañana, pero poco después recito unn rosario de “Om a ra pa tsa na dhi”. He sentido una fuerte conexión con Manyushri desde que era un niño pequeño. Tengo claro que, como resultado de recitar continuamente este mantra y la Alabanza al Inteligente conocida en tibetano como Gangloma, mi inteligencia y sabiduría se han agudizado. Por lo tanto, les insto, amigos del Dharma, a que reciten también la alabanza y el mantra de Manyushri. Aumentará su capacidad de estudio y aprendizaje.
»En la alabanza se dice que el discurso de Manyushri, melodioso con sesenta facetas, elimina la penumbra de nuestra falta de conocimiento. Con el apoyo de Manyushri he podido disipar la confusión y la ignorancia en la mente de muchas personas sobre qué adoptar y qué descartar».
Su Santidad señaló que creamos todo tipo de karma negativo. Construimos armas nucleares y luchamos entre nosotros. Recomendó que recemos para que se despejen las nubes de la ignorancia. Hizo hincapié en que lo mejor es ayudar a los demás, pero si no se puede ayudar, al menos se puede evitar hacer daño.
Guiando a sus oyentes a través de la iniciación de permiso de Manyushri, Su Santidad declaró que cuenta con su comprensión de la vacuidad y con la bodichita gracias a la amabilidad de sus tutores. A la hora de ofrecer el pastel ritual para dispersar los obstáculos (kektor), señaló que nadie es un obstáculo para él. Que, al contrario, convocaba a esos seres para ayudarlos.
Cuando terminó de conceder la iniciación de permiso, Su Santidad comentó que era importante que los estudiantes se sintieran convencidos de que con las bendiciones de Manyushri también lograrían generar la bodichita y la sabiduría que comprende la vacuidad. Añadió que aunque hay muchos países budistas en el mundo, sólo el budismo tibetano conserva la capacidad de explicar el Dharma ampliamente como se hacía en la tradición de Nalanda.
Su Santidad invitó al público a formular preguntas. Los estudiantes mencionaban dónde estudiaban y a menudo prologaban su pregunta con una estrofa de homenaje a Su Santidad o una oración por su larga vida.
Le dijo a un estudiante del Men-tsee-khang que la medicina tibetana es eficaz para tratar las dolencias crónicas, mientras que la medicina alopática es especialmente útil para tratar las urgencias. Hizo hincapié en que un aspecto importante del cuidado de los enfermos es tener un buen corazón.
Su Santidad estuvo de acuerdo con un estudiante que observó que los jóvenes de hoy en día tienden a adoptar costumbres extranjeras. «Es cierto que muchas personas se dejan llevar por la cultura occidental descuidando sus formas tradicionales. Sin embargo, también ocurre que hoy en día hay muchos occidentales interesados en las tradiciones tibetanas».
En cuanto a los diferentes enfoques de estudio, Su Santidad expresó su satisfacción por el hecho de que los tibetanos escolarizados en la India hayan podido beneficiarse de la educación tibetana moderna y tradicional, lo que significa que han aprendido sobre el desarrollo material, así como sobre el funcionamiento de la mente y las emociones.
Un estudiante observó que muchos textos de entrenamiento mental dicen que la bodichita por sí sola puede cumplir las dos acumulaciones de mérito y sabiduría. Sin embargo, esto parece contradecir un comentario sobre la cognición válida que afirma que la bondad amorosa por sí sola no contrarresta la ignorancia. Su Santidad le dijo que los seres sensibles de todo el espacio son iguales en desear la felicidad y en no desear el sufrimiento. Dijo que la penúltima estrofa de los Ocho versos del adiestramiento mental trata de igualarnos e intercambiarnos con los demás:
En resumen, que pueda, directa o indirectamente, donar toda la mi ayuda y alegría a mis madres, y que pueda tomar todo su daño y dolor secretamente para mí.
Esta aspiración sirve para fortalecer nuestro valor y determinación para trabajar en beneficio de los demás.
A la pregunta de si los monjes y los laicos toman refugio en las Tres Joyas de forma diferente, Su Santidad respondió que los dos grupos de personas pueden vestir y comportarse de forma diferente, pero cuando se trata de tomar refugio y de cultivar la bodichita y la comprensión de la vacuidad, no hay disparidad entre ellos.
Respondiendo a una pregunta sobre el karma y los reinos infernales, Su Santidad citó el Autocomentario de Chandrakirti a su Ingreso al camino medio en el que afirma que no acepta la cosmología de Vasubandhu. Su Santidad añadió que él tampoco la acepta. Con respecto al karma, parece claro que si ayudamos a los demás con un corazón sincero, ello nos reporta beneficios a ambos. En cambio, si engañamos a los demás, ni ellos ni nosotros saldremos beneficiados.
«Es porque cultivo la bodichita y la comprensión de la vacuidad por lo que la gente confía en mí —reveló Su Santidad—. Si mis actos no concordaran con mis palabras, no lo harían. Como he dicho antes, todos somos iguales en desear la felicidad y tratar de evitar el sufrimiento. Por lo tanto, es importante que nos refrenemos incluso de pequeños actos dañinos».
Cuando estaba a punto de abandonar el templo, Su Santidad se acercó una vez más al borde de la plataforma y dijo a los estudiantes que es debido a su práctica de la bodichita y la vacuidad por lo que siempre lo ven sonriente.
«Lo más importante es tener un corazón sincero y cálido».
